La Ciudad Sustituida IV. Rambles-Tallers

¿Se acuerdan? Seis ciclistas descienden por las Ramblas. Tres de ellos lo hacen para celebrar la proclamación de la Segunda República. Los otros tres, para recordarlo.  (Joan Fontanillas, 1932; Ricard Martínez, 2006)

Recuperamos la serie sobre la proclamación de la República en Barcelona, que iniciamos hace un mes. Os recuerdo que esta foto es en relieve. la podéis ver con la ayuda de unas gafas para anáglifos. Aquí la tenéis también en 2D.

Vamos a bucear en esta foto tomada en la Rambla, a la altura de la calle Tallers.

Tres ciclistas sonrientes con sus bicis de carreras. Es curiosa la aparente diferencia en su  tipología, aunque, se diría que los tres son amigos. Presten atención a la escena que sucede tras ellos.

Un republicano tira la caña a unas señoritas que portan unas banderas. ¿Se acuerdan de él? Había aparecido en la primera de las fotos, en la calle Pelai. Las chicas no parecen hacerle mucho caso. Será porque van bien custodiadas por una robusta portaestandarte. Observen las banderas. La de la derecha es una senyera catalana. Cabría esperar que la de la izquierda fuese una republicana. En cambio, se trata de una tricolor francesa. Los tonos son los que podría registrar la película ortocromática. Muy oscuro para el rojo, junto al asta, y un tono claro, para el azul.

Tras las banderas, el hotel Lloret, que aun sigue abierto. En cambio, la sombrerería Lluch ha sido sustituida por una zapatería.

One way. Un azulejo nos indica que la calle Tallers ya era entonces una calle de una sola dirección.
 Ese azulejo sigue aún en su sitio.

Al fondo, junto a la estación de Sarrià, el café Zurich. Hoy en día lo sustituye una réplica. El toldo hace referencia a una marca de anís que aún se fabrica en Badalona.

Su etiqueta era un homenaje a Darwin. Aunque hay quien dice que es una caricatura de Vicente Bosch, el propietario.

El papel que sostiene el Señor Bosch - o nuestro ancestro - indica una cierta simpatía por la opción evolucionista.

Siguiendo el ejemplo impuesto por la etiqueta, yo tampoco engaño y les muestro como hicimos esta foto. Isabelle Rabaud, Carles Gené y Xavier Mulet acaban de atravesar el ectoplasma de los ciclistas, el republicano galante, las señoritas francófilas y su fornida carabina. Tras ellos están Martí Llorens, Maite Caramés e Isabel Flores. Sobre la escalera, un servidor, caracterizado de blanco fácil. A mi lado, Olga Marín, quien me  ayuda en la producción de todos estos proyectos arqueológicos.

3 comentarios:

  1. Cada día se aprende algo! Unos ciclistas de lujo!

    ResponderEliminar
  2. Me parece ver que la pericia de los colocadores de placas de calles, les hace aprovechar los mismos agujeros, ya que la Calle de Tallers, fue después Calle Tallers y ahora como se ve en la segunda foto Calle DELS Tallers.

    En cuanto al señor mono del anís, corría otra leyenda urbana que indicaba que era la cara de un socio que le había gastado una mala pasada, cosa poco evolucionista y mas bien vengativa.

    Y una cosa mas al ciclista de negro lo ha hecho usted vasco.

    ResponderEliminar
  3. Pedro,
    A mi esta foto me parece muy buena. Fontanillas tuvo la pericia (o la potra) suficiente para captar un momento mágico.
    Xnem
    Solo Ud podría hacer esta apreciación sobre cómo optimizar el trabajo de colgar una placa en una pared.
    Sobre los vascos, ya sabe Ud. que un vasco puede nacer donde le de la gana.

    ResponderEliminar